Editorial semanal: Vivir en un lugar como Venao

El aire de libertad de aquellos que dejan la gran ciudad para mudarse a un paraíso como este


Siempre hay un par de veleros anclados al final de la bahía que es Playa Venao, mirando hacia el mar a la izquierda.

Cuando vengo me pregunto de quién serán esos veleros, pienso también que no sería mi método favorito de venir a Venao pero también razono sobre lo bien que hicieron los dueños del velero en elegir esta playa para venir.

Mucho hablamos de los distintos paraísos que el desarrollo permanente ha destruido. Justamente, estamos presenciando como Bali está siendo literalmente pasado por arriba por una topadora.

Por suerte, y después de venir muchos años, desde la total ignorancia no veo que Venao esté siendo víctima de algo así.

Sí es cierto que es seguramente uno de los lugares que más he visto desarrollarse y crecer en los últimos años, de los que vi con mis propios ojos. Realmente no recuerdo cuándo fue la primera vez que vine, pero seguro hace más de 15 años y puedo decir tranquilamente que era muy distinto; sin supermercados y con pocos hoteles construidos.

Hoy la oferta es mayor pero el desarrollo y el espíritu de la playa se mantiene.

Esos lugares a los que se puede ir caminando a todos lados, esos lugares que uno mira la playa y tiene conciencia plena de que está en un paraíso, con olas consistentes y un entorno natural hermoso.

Me gusta ver a la gente que elige cambiar su vida y venirse a vivir a lugares como este, colocar un puesto y vender cualquier cosa… Cambiar su estilo de vida para “vivir en donde tú pasás tus vacaciones”.

Hablo con ellos en la plaza de comidas del evento y se los ve con un aire de libertad que no acostumbro sentir en la ciudad en la que vivo yo.

Tengo un amigo que es abogado de la gran ciudad, de un gran estudio, que siempre bromea con hacer justamente eso… Largar todo al diablo y simplemente vivir simple.

Yo creo que por lo menos por unos cuantos años nunca lo haré y también creo que mi amigo tampoco lo hará, pero admiro a todos los que lo hacen y los felicito.

Debe ser lindo que tu casa se convierta en este paraíso y todos los días despertar, ir a la playa y ver lo que estuve viendo en este evento.

Solo un humilde pensamiento que que quería compartir.

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