Kai Gale se fue a Desert Point al mismo tiempo que el campeonato de Padang Padang y su estrategia funcionó a la perfección. La que en algún momento fue considerada la mejor ola del mundo, ha sabido crowdearse de lo lindo luego de que se dio a conocer para todo el mundo.

Pero cada tanto, Desert guarda regalos para aquellos que la visitan y tienen un poco de suerte, como Kai en este día.

“Uno de los mejores días de mi vida en cuanto al surf”, cuenta. “Este era el mismo oleaje que estaba recibiendo la copa Padang Padang, lo que significaba que apenas iba a haber multitud en Deserts. Solo había cinco personas por la mañana este día, se sintió como un sueño. Largas izquierdas sin nadie fuera, ¿me estás tomando el pelo? No tardé mucho en ponerme al ritmo de la ola y enamorarme de ella”.

Al goofy footer se lo ve bien sintonizado con la ola, metiéndose un tubo atrás del otro y como él mismo dice en el video, salía de un tubo y se creía que ya estaba pero venía otro y otro y otro.

“La gente era muy genuina y acogedora, tuvimos la suerte de quedarnos en Budis, realmente podías sentir el ambiente local. Va a ser difícil superar un viaje como este. Estoy muy agradecido. Gracias, Desert Point”, concluye.