Presenta Capi Bar - Video y relato por Juani Gayol 

El forecast marcaba que iba a haber un buen swell, que mágicamente para los australianos es un día feriado, como también lo es en Sudamérica por el viernes de Páscuas. Marcaba tremendo swell generado por una tormenta en el medio del océano.

Ese día me escribió el Waxhead, el Matt , para ir a filmar de mañana. Nos levantamos 5:30, me reuní con él, chequeamos las olas, estaba gigante pero medio movido y nos fuimos a esta playa y salían unos tubazos.

Lo primero que hice cuando bajé a la playa fue decirle: “Esto parece Pipeline”. Y le pregunté si era así por lo general, y me dijo que no, que los bancos estuvieron mal en los últimos años pero que ahora habían vuelto a formarse y quedaron increíbles.

La primera impresión cuando la vi rolar fue pensar que era igual a Pipe.

Y ahí empezó todo el show.

Cuando llegamos no había nadie en el agua, estaban recién entrando algunos y vimos que hasta en los videos que circulan hasta Joel Tudor comenta que si no ponían que era Sídney pensaba que era Pipe y así varios más.

Estaba pesado y con mucha corriente para entrar. Los que entraban se tenían que comer unas buenas guillotinas en la cabeza y muchos rebotaban, obviamente y no había tanto crowd porque las olas estaban muy pesadas y en el momento que hubo más crowd hubo entre 15 y 20 personas en el agua.

Ahí fue que empecé a filmar con el dron porque había mucha contraluz del amanecer; eso con el offshore y cómo peinaba la ola y quedaba toda el agua en el aire, con el sol de frente no se veía nada.

Por eso volé el dron para que se pueda apreciar la ola. Ahí pude agarrar la ola de Kobi Clements que fue una locura, y un par de tubos más.

Y más a media mañana cuando me quedé sin batería en el dron y el sol estaba un poquito mejor, busqué un ángulo mejor y empecé a filmar y agarré algunos tubazos más. Ahí agarré el de Jordy, que se había metido varios buenos antes, pero ese fue el mejor de la mañana, todo el mundo pensó que no salía. Bajó una gigante, le cayó toda una sección delante que la correteó, lo cubrió la sección y cuando salió todos en la playa gritaron como locos.

Fue una mañana mágica para Sídney y me atrevo a decir que fue del año y de varios años en Sídney, según lo que dicen los locales.

El show que había fuera de la playa estaba increíble porque al ser vacaciones, todos estaban con los niños observando el swell que era un show. La gente gritando como locos y la cantida de palos que se dieron fue abismal; eso también levantaba los gritos de todo el público.

Muy buena experiencia y la realidad es que me siento afortunado del timing con el que llegué a Sídney, haber pegado ese swell y registrarlo y generar todo el conenido que generé.

Fue increíble para mí, fue como arrancar con el pie derecho en esta nueva experiencia en Australia.