Para que el hawaiano Nathan Florence diga que surfeó la que probablemente es la mejor derecha de su vida, tiene que haber sucedido algo especial.
Bajó profundo con su 7 pies, directo para el tubo, le cayó una sección bien amplia y larga delante suyo, anduvo por el foamboall, logró sortearlo y encima pasar por una sesión más.
"El tamaño, la intensidad, usar wetsuit en una 7 pies que no había usado", dijo Florence que fueron claves para decir lo que dice sobre la ola.
Y remató que el sentimiento que tuvo en Teahupoo cuando se surfeó una locura de ola, no volvió a tenerlo hasta esta bomba.
