Presenta: Capi Bar - Todas las fotos por @renatotinoco y @marcelofreire

Después de otra temporada en la que no tiene ni cinco minutos para descansar, el chef y propietario de las cervecerías y restaurantes Capi Bar ubicadas en Punta del Este y La Barra, Diego “Capi” Tarallo, se fue de vacaciones a Fernando de Noronha.

Conocido como el Hawái brasileño, el archipiélago está ubicado a 350 kilómetros de la costa más nordestina más cercana, recibe sin interrupciones los mismos swelles de norte que golpean Nazaré y el resto de la costa europea produciendo una cuota interesante de tubazos temporada a temporada.

Para muchos es un paraíso natural, y para muchos otros es también un paraíso tubular. Capi se fue para allá por lo segundo aunque pudo compartir tiempo de calidad con su familia, señalando que es un buen lugar para viajar en equipo.

Tanto en la Cacimba do Padre como en el Laje do Boldró, se llevó su buena cuota de olas de las que habla debajo.

¿Por qué elegiste irte a Noronha?
Noronha viene de la época de la Fluir. Me acuerdo que lo veía como un lugar increíble. Siempre decían que era como el Hawái brasilero, además solo rompe en cierta época del año cuando recibe las marejadas.

No tiene los mares gigantes que entran en Hawái, pero se decía que era parecido. Recuerdo las Fluir de) cuando había campeonatos de la ASP ahí. Siempre miraba y lo veía como un lugar lejano pero cercano. Siempre decían que era caro para ir y eso me llamaba. No tanto por caro, sino porque era difícil llegar y quedarse mucho, porque era una reserva. Se hizo un poco ese cuestionamiento antes de ir y se vio que nada que ver, que se puede sacar pasaje, se paga la tasa para estar allá y te quedás y pegás tremendas olas.

El Gabeta había ido hace dos años y me dijo que era un lugar increíble con tremendas olas y las playas más lindas del mundo.

Una vez allá, ¿qué te llamó la atención?
Allá te llama la atención el color del agua, turquesa cristalino, muy puro. También la buena onda de la gente, incluso los locales. Es un lugar chiquito que lo podés recorrer fácilmente en auto en un par de horas. Es todo mar y vida marina, por ahí no tanta vida terrestre. Mucho tiburón, tortuga e infinitos peces. Lo que llama la atención es el paraíso con rocas gigantes y verdes y el color del agua.

¿Dónde pudiste surfear?
Pude surfear tres olas. Las que más me gustaron fueron Cachimba do Padre y Boldró; una ola que se surfea con marea baja y es fondo de piedra. Es bastante pesada y fuerte, peligrosa. Los locales dicen que es hasta más peligrosa que Cacimba por el fondo de piedra que tiene.

Cacimba do Padre es la ola. Izquierda y derecha, depende de la dirección de swell si es más izquierda o derecha. Se surfea con marea media llegando a alta o alta llegando a media. No se surfa con marea baja porque cierra mucho.

Y hay más olas en la isla, el Abrás, por ejemplo, pero no rompió.

¿Cuáles fueron tus mejores olas?
En Cacimba y Boldró; dos tubos con salida. Si bien es un lugar que tiene mucho tubo, predominan los locales que las saben surfar: se pegan tubazos y salen. Es muy difícil para nosotros, para gente amateur, pegarse buenos tubos con salida y largos. Sí lo vi adentro del agua.

Fuiste con tu esposa y tu hija, ¿es un buen destino para viajar en familia?
Es un muy lindo destino para ir en familia.

¿Qué hay en Noronha que nadie sabe?
Los locales surfean a las 8 de la mañana y no a las 6 y no se quedan a fin de tarde tampoco. Ellos mismos te dicen que por ahí vas temprano y pegás una sesión épica solo, pero no hay nadie en el agua. Recién a las ocho empieza a caer la gente. Lo mismo en el fin de tarde. En Uruguay te quedás fisura hasta el último momento de luz, e incluso de noche. Ahí poco antes de que se vaya el sol el pico se empieza a vaciar solo por la abundancia de tiburones que hay. Hace un mes hubo un ataque de tiburón a una nena de ocho años que se estaba bañando con su papá en Bahía sudeste. Bahía León tiene carteles advirtiendo sobre la presencia de tiburones. Uno tiene que ser un poco consciente en las horas en las que se mete al mar y cuidar a la familia.

Hay muy poca verdura y fruta. Además, seis meses al año queda flat absoluto. Queda para bucear. Los locales no surfean. Dicen que hay olas del otro lado de la isla, pero no van porque son sopladas y difíciles. Es un lugar de noviembre a abril. Ahí quiebra perfecto y recibe los swelles.

"Es paradisíaco. Hay una playa que se llama Bahía Sancho que dicen que es la playa más linda del mundo, y para mí lo es"

Es paradisíaco. Hay una playa que se llama Bahía Sancho que dicen que es la playa más linda del mundo, y para mí lo es. Es difícil el acceso y tenés que bajar una escalera de 200 metros entre piedras, pero la playa es espectacular.

¿Qué te parece que hubieras hecho distinto para este viaje?
Me hubiese gustado bucear. Preferí levantarme e ir a pegar tubos, porque aparte estuvo siempre bombeando. Me gustaría ir en una época que esté un poco más flat. Debe ser alucinante bucear ahí y ver tiburones, tortugas; estar tranquilo en el mar.

¿Qué podemos esperar del Capi y del Capi Bar en 2022?
Alguna cervecita nueva. Siempre tenemos en mente sacar un estilo nuevo o dos por año, algún platito gastronómico nuevo también, siempre viene bien y ofreciendo música en vivo. La idea es estar abiertos todo el año, tanto Capi Punta como Capi La Barra. Ese es un poco el espíritu de Capi y lo que se espera para este 2022.