Fue un lunes épico en este lugar especial del mar territorial uruguayo

“Hemos visto esta ola bien más grande, pero no con la perfección de este swell. Estaba muy bueno, había unos tubos cuadrados rompiendo arriba de la roca, un slab alucinante”, contó Luca Cohen


Foto de portada: Luca Cohen en la ola del día. Todas las fotos: Juanma Real 

El propio Luca Cohen, uno de los surfers que pacientemente viene conociendo y surfeando esta ola hace ya varios años contó que ha ido a este lugar varias veces pero que nunca lo había visto tan bueno como el lunes pasado.

“Hemos visto esta ola bien más grande, pero no con la perfección de este swell. Estaba muy bueno, había unos tubos cuadrados rompiendo arriba de la roca, un slab alucinante”, le contó a DUKE.

Los integrantes de la expedición de esta vez fueron el propio Luca, Pepe Gómez y el fotógrafo Juanma Real.

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Retratar las mejores olas surfeadas volvió a ser un desafío, pero se lograron algunos registros alentadores. “Fue muy difícil porque el fotógrafo tuvo que meter mucho huevo para mantenerse en el agua, las olas grandes no las pudo sacar. Sacó las de abajo, las chicas y por suerte salió algo de material y salió todo bien”, contó Pepe.

En medio de uno de los mejores veranos de olas de la historia del Uruguay, otra y muy alentadora mancha se pintó en el mapa; swell del sureste y un buen periodo.

“Hemos visto esta ola bien más grande, pero no con la perfección de este swell. Estaba muy bueno, había unos tubos cuadrados rompiendo arriba de la roca, un slab alucinante”, cuenta Luca. Todas las fotos: Juanma Real 
El equipo de la expedición Pepe Gómez, Luca Cohen y Juanma Real detrás del lente... Y la moto, que prendió la alarma porque se quedó sin gasolina.

“Ya venía mirando ese pronóstico con el Pepe hacía como seis días, y seguía firme, no cambiaba. El día antes vimos que iba a estar sin viento y con grandes chances de estar muy, muy bueno. Salimos bien temprano para ahí, son más o menos 30 minutos de navegada y cuando llegamos vimos que estaba muy bueno”, contó Cohen.

Y agregó: “Empezamos haciendo tow in, bien seguro, hay que jugar seguro ahí. Éramos tres en una moto, la seguridad es muy importante. Perder una moto ahí puede significar tener que nadar bastante. Así que arrancamos con un tow, bien seguro, Pepe está manejando bien, ya viene practicando mucho en Nazaré, le tengo mucha confianza y además ya habíamos surfeado esta ola otras veces”.

La gema era la izquierda tubular que se ve en las fotos que mordía bien el banco en las series intermediarias: “La lectura es muy difícil porque en los sets no rompían los tubos y nosotros estábamos en busca de ellos y esas olas no se veían, de la nada tiraba un tubazo. De a poco fuimos ajustando los ángulos con Juanma y al final pudimos hacer buenas tomas”, contó Luca.

Se intentó de remada
Llevamos la gun, la 9’2, intenté tomar algunas de remada pero con la marea bajando estaba muy chupada y se hizo muy difícil. En ese lugar hay que estar muy bien ubicado, si estás ya dos metros mal ubicado ya no la vas a tomar o si la tomás te llevás el wipe out. Entonces tienes que tomarla bien cuando sube de la nada la ola tenés que estar ahí y ya tomarla.

Cuando parecía que empeoraba, se puso mejor
“Volvimos a hacer tow in y en un momento entró un vientito pensamos en irnos pero paró y ahí quedó alucinante. Quedó aceite y tirando tubos cuadrados y ahí fue que tomé ese tubo (ver foto), Pepe me puso en una perfecta, fue increíble. Y seguimos ahí agarrado altas olas todos, y como siempre las buenas siempre solas. Es muy difícil lograr tomar las buenas”, agregó el surfista.

La alarma de la nafta y una bomba de remada de Pepe
“Ya quedaba poca nafta, la alarma de la moto empezó a sonar y tuvimos que irnos. Estaba cada vez más clásico, estaba para quedarse.

Cuando estaba levantando el ancla entró una bomba y Pepe se había ido a buscar una de remada, se mandó en ella, la tomó de atrás y casi la hace; por muy, muy poco no la completó. Estaba mutante. Vino con un poco de espuma, llegó al banco, se dobló y… Casi la hace.

Volvimos con la alarma con la alarma de la moto sonando, por suerte llegamos, la misión fue un éxito, fue alucinante, todo bien”, sentenció Cohen.

Pepe y los riesgos del lugar
“Hay que tener mucho cuidado en esa ola, el fondo es de roca, se chupa y va muy rápido. Intentamos surfearla de remada y nos dimos tremendos wipeouts, no pudimos tener registro de eso por la posición, fue muy difícil. El golpe es duro, al ser fondo de roca siempre te quedás abajo hasta que la ola cuando quiere te suelta y ahí podés remar para arriba”, contó Gómez.

Después de bajar bombas en Nazaré, Pepe Gómez busca en Uruguay desafíos de tamaño. Este lugar lo motiva.
Slab uruguayo.
En Uruguay hay olas que piden tow in.
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