El joven Tim Elter nació y creció en Canarias pero sus papeles indican que es alemán; es un super local de las olas de ahí y se manda en esos tubos cuadrados, pesados y con poca agua debajo que por ahí quiebran.

Además, tiene un buen surfing de línea y su lado progresivo también, haciendo expresivos aéreos.

Ama surfear las peligrosas olas de casa: “Me da un placentero sentimiento de paz, paz conmigo mismo y lo que me rodea. Simplemente disfruto del deporte y el hecho de que estoy totalmente expuesto a la fuerza de la naturaleza”, dice en la entrevista.

Su nuevo video, Offseason, muestra, con una calidad impecable de fotografía, su vida en casa en Canarias cuando no está recorriendo el tour europeo. Una joyita. 

Vivir en Canarias debe ser una de las mejores cosas que le pueden pasar a un surfista, pero también de las más peligrosas, ¿cómo te llevas tú con esta dicotomía?

Como nací en Canarias y aprendí a surfear en las olas de aquí, me acostumbré de inmediato a la fuerza de las olas atlánticas y al fondo de roca. Me acostumbré a no poner el pie en el fondo y a evitar las caídas profundas en agua de poca profundidad. Aún así he tenido que lidiar con golpes y cortes, además de un gran número de tablas partidas a lo largo de los años.

Desde mi punto de vista, tenemos algunas de las mejores olas del mundo en Canarias, pero no son nada fáciles de surfear y algunas como “El Quemao” traen grandes consecuencias en caso de fallar. Es solo un pequeño margen entre un tubazo y una visita en el hospital.

Todos esos tubos increíbles que te estás metiendo en el video tienen poca agua debajo, y un afilado fondo de piedra volcánica, ¿es así?

Sí, todas las olas tienen fondo de piedra volcánica, que incluso tras millones de años de erosión siguen siendo afiladas, hay veces que me pongo casco y chaleco de impacto para absorber caídas en caso de tocar el fondo y evitar graves lesiones.

Pero a ti se te ve disfrutando esas olas, ¿no te da miedo?

Sinceramente es al contrario, me da un placentero sentimiento de paz, paz conmigo mismo y lo que me rodea. Simplemente disfruto del deporte y el hecho de que estoy totalmente expuesto a la fuerza de la naturaleza. No pienso en preocupaciones de mi vida, ni dramas, ni quehaceres, solo me concentro en la siguiente ola y qué hacer en ella.

¿Qué quisiste mostrar en el video?

Quise mostrar mi día a día y mi surfing cuando no estoy pendiente de competición y entrenamientos, además del tiempo que paso con amigos y el provecho que le saco a estar en mi hogar.

¿Por qué se llama Offseason?

Se llama Offseason porque representa los tres meses que estoy en casa fuera de la temporada. De noviembre a marzo no tengo campeonatos (menos el Quemao Class), no pienso en competición, no entreno y tampoco me estreso a nivel mental. Es el periodo en el que me relajo y surfeo sin pensar en técnica o maniobras especificas. Simplemente voy con el flow y aprovecho las olas sin meterme ningún tipo de presión.

Has estado mandándote en mares más grandes, de hecho hace no mucho buscabas un chaleco inflable para poder ir más grande, ¿cómo te ha ido con eso?

Aún me acuerdo de eso, fue tras un accidente que tuve en 2020. Era un día de olas grandes y mar revuelta, la tabla me dio en la cabeza en un wipeout y me llevé un susto, además de una conmoción cerebral de tercer grado.

Tras eso tuve algo más de respeto por un tiempo, pero tras una buena sesión en ese mismo invierno se me quitó el miedo y mi confianza volvió al 100%.

Después de eso decidí comprar un casco y quedarme con el viejo chaleco de impacto que tenía. Aún lo sigo teniendo y usando ya que no creo que me hace falta un chaleco inflable para las olas que surfeo de momento.

Eres canario y alemán, y tienes nivel para competir en el equipo de tu país y buscar un lugar en los Juegos Olímpicos, ¿como andas con ello?

Aunque nací en Fuerteventura solo tengo la nacionalidad alemana, por tanto compito bajo la bandera alemana. En 2014 entré en el equipo nacional junior y estuve en él hasta el año pasado.

Este año entré al equipo open compuesto por los cuatro mejores hombres y las cuatro mejores mujeres. De estos, tres de cada género se clasifican para ir al mundial de El Salvador. Para la selección de este año quedé fuera, siendo el primer hombre de reemplazo.

Mi gran sueño es clasificarme para los juegos olímpicos a través del mundial de la ISA, pero antes de ello tengo que entrar a la selección nacional. Por tanto, mi meta para 2024 es ser elegido para ir al mundial y luchar por mi plaza en los Juegos Olímpicos.

¿Qué planes tienes para este 2023?

Estaré compitiendo en el JQS en Europa donde quiero saborear una final, ya que este es mi último año en los Junior. También haré gran parte del QS europeo, donde simplemente quiero aprender y ganar experiencia competitiva. Quizá a fin de año me invitan una tercera vez al Quemao Class, mi evento favorito donde intentaré darlo todo y llegar a la final, como hice en 2021.

Además, haré un nuevo proyecto con mi colega Sebastián Bechtel. Una peli de surf que contará algo más de mi personalidad y del deporte del surf en general, mostrando distintas olas de países europeos, combinado con escenas de naturaleza y espectáculo.