El cuento detrás de aquel "discurso" ganador de Fabio Gouveia

Y el suceso que no debe pasar inadvertido por todo el Brasil, de que Ian Gouveia haya podido honrarlo, explicando en perfecto inglés qué diablos estaba haciendo


Foto de portada: WSL/Tostee

El surfing brasileño ha cambiado radicalmente desde aquel campeonato en la Gold Coast en el que Fabio Gouveia esbozó, muerto de risa, unas palabras inentendibles: “Tui, tuaré, tudere, hare days, tu sei, ma love you, tudere uai, tudei tu love, thank you”.

Eran tres los brasileños en el tour y el mundo del surfing era dominado por australianos, hawaianos y estadounidenses, tal vez algún sudafricano.

Por ahí se terminaba la cosa.

Hay una película que para nuestra generación, los nacidos en el 80 y alrededores, llamada Fabio Fabuloso que cuenta de la vida de él, uno de los mejores surfisas de la historia, uno de los que tiene la mejor línea.

Gouveia, paraibano que surfeaba en Baía Formosa, dueño de un talento impresionante, el mismo lugar que vio nacer a Italo Ferreira, no quería saber de nada con el tour mundial.

¿Por qué? Porque le complicaba la vida, como en el video queda claro: No hablaba inglés y no sabía viajar, no sabía ni para donde arrancar. Pero su innegable talento llevó a que gente haga lo imposible porque se dedique al surfing profesional.

Por esto, luego de ganar el título mundial amateur en Puerto Rico 1988, la versión de antes de los ISA World Surfing Games, en un campeonato bien competitivo, Álfio Lagnado fundador y dueño de su marca patrocinadora, Hang Loose, tuvo una idea.

Él sabía que más al sur, en Santa Catarina, Avelino Bastos, shaper de Tropical Brasil, tenía a Teco Padaratz listo para competir el circuito mundial.

Teco, ahora presidente de la CBS, venía de una familia de clase media que lo había mandado a terminar el liceo a California, sabía viajar, hablaba inglés y se manejaba mejor con la idea del circuito mundial.

Así, Lagnado les planteó: Yo patrocino a Teco para que haga el circuito mundial, pero tengo esta condición: Un equipaje con dos patas para cargar llamado Fabio Gouveia.

Con un amigo de ruta Gouveia accedió y ese dúo dinámico cambió la historia del surfing mundial. Anotó a Brasil en el mapa y comenzó la gloria del país que en los últimos 10 años ha dominado al surfing mundial.

Todo esto está bien contado en la película Fabio Fabuloso de Pedro Cezar, que está colgada en Youtube completa (ver arriba). Una obra de arte que tiene testimonios de varios de los mejores del planeta y de varios personajes importantes del surfing brasileño.

Carismático, Fabinho no dudó en hablar e inventar un discurso balbuceando algo que parecía inglés y no lo era. Un suceso que es gracioso de un ser que hacer reír a una piedra pero que no deja de ser un poco triste.

¿Qué hubiera sido de Fabinho y del surfing brasileño si no se daba esa alianza con Teco?

El suceso de ayer, de Ian imitando a su papá, no debería pasar inadvertido como una sola gracia, debería ser motivo de orgullo de un padre que logró poner en el mundo a un hijo que, educado, pudo explicar en buen inglés aquello que Fabio hizo 30 años atrás.

Pero también motivo de orgullo para todo el surfing brasileño, que tuvo en estos años a surfers con talento que no estuvieron preparados para hacer el tour y por más de tener el surfing, lo abandonaron, como el campeón mundial de la ISA, Fabio Silva, por mencionar alguno.

Ahora el brasileño viaja por el mundo de tú a tú y conquista los campeonatos, da entrevista en inglés y encima gana muchos más campeonatos.

Es un gran contraste que no debe pasar inadvertido.

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida por DUKEsurf.com (@duke_surf)

Comentarios: