El de hoy fue el mejor día de la historia de los Juegos Olímpicos

De 1896 hasta hoy no hubo una jornada olímpica mejor que el 29 de julio de 2024; qué alegría haberlo vivido y qué pena que se haya terminado tan rápido


La cobertura especial del surfing olímpico en DUKE es presentada por la International Surfing AssociationLa Isla Surf ShopSurfCycledDourado MotorsLineupSwellboardsALASCapi Bar, Quality Surfboards y Ramp 4 Kids - Foto de portada: ISA/Ryder

El de hoy fue el mejor día de los Juegos Olímpicos de la historia, no me cuesta nada decirlo ni tampoco me cuesta mucho hacer las cuentas. Debo pensar un par de cosas nada más: ¿Fue mejor que el surfing en Tokio 2020? Sí, por lejos.

¿Fue mejor que el 10 de Nadia Comăneci? ¿Que el record mundial de Usain Bolt? ¿Que el vuelo del Bob Beamon? ¿Que los cuatro oros de Jesse Owen? ¿Que los ocho oros de Phelps? ¡Sí! ¡Claro que sí!

¿Soy parcial al decirlo? ¡Claro que sí! Amo el surfing, amo ver surfing y mucho más si es en olones de 8 a 10 pies con tubos cuadrados

Contra todas las predicciones que se hicieron en la previa del evento, el campeonato no iba a ir al agua hoy, junto con la entrada de las olas entraría un molesto viento on shore que deterioraría las olas.

El evento supuestamente iba a ser de un Teahupoo divertido y básicamente sin consecuencias y terminó teniendo uno de los días más peligrosos del año en su tercer día olímpico.

La ISA goza de buen karma, ha sucedido muchas veces en muchas ocasiones. En Tokio, tras tres semanas de flat total, el primer día de campeonato entraron olas surfeables que luego siguieron creciendo.

Yo pensaba que era algo que al presidente Aguerre le gustaba repetir nomás, pero con lo de hoy me quedé un poco perplejo…

Olas sólidas de ocho pies producidas por un swell bien de oeste, cuadradas, bien apretadas contra el reef hicieron al mejor espectáculo de la tierra.

No es por nada que los puntajes más altos de la historia del surfing olímpico se vieron hoy: El 9,9 de Medina y el 18,13 de Joan Duru.

Pero volviendo a lo olímpico y los 128 años de historia. Jamás tuve la alegría, o viví la emoción que me tocó vivir hoy en unos Juegos Olímpicos. De hecho, recuerdo pocas cosas de todos los juegos que me tocaron vivir en 43 años de historia.

Lo de Nadia me lo contó mi madre y lo de Bolt lo debo haber visto en las noticias. Me acuerdo también de un uruguayo que ganó una medalla de plata, eso fue emocionante.

Pero nada caló tan hondo en mi memoria como lo que vi en Tokio y, ni que hablar, como lo que vi hoy aquí.

Es más, de Tokio me acuerdo del aéreo de Kanoa, de otro de Kolohe Andino con el que le ganó a John John, de uno que hizo Hiroto Ohhara con el que le dio vuelta la serie a Tudela, y de Italo haciendo un backflip cuando baja del escenario. Por ahí nomás termina la cosa. ¡Y eso que estaba ahí!

Lo de hoy, por más que esté más viejo y seguramente me olvide más rápido de las cosas, creo que difícilmente se va a ir de ests gastadas neuronas.

¡Qué tubazos por Dios!

Puedo repasar el día enterito: El 8,5 de Alonso envuelto en el foamball y saliendo a 500 por hora para celebrar; el upset de Inaba sobre Toledo en unos olones que daban miedo; la locura de Kauli mandándose en las bombas de su casa con todo el pueblo agitando porque su pollo estaba metiéndose en cuartos; la fineza de Joan Duru para sobrevivir al foamball y a la gran valentía de Alan Cleland; el 10 de Medina (que fue un 9,9) e implicó la venganza sobre Kanoa (una venganza que demoró tres años); una de las mejores series de la historia que le dio 18,1 a Chianca y 17,8 a Ramzi, la sorpresa de John John yéndose tempranísimo ante Robinson y la clase y los cojones de Ewing de mandarse en las bombas cuando finalmente entró el viento.

Ha sido un día milagroso. Ocho series que estoy seguro ya están dando la vuelta al mundo; imágenes de ese juego tan mágico que es el encuentro del hombre con la más violenta, hermosa y perfecta forma de energía.

Una actividad que de casualidad es considerada un deporte porque es más magia que otra cosa.

¡Qué maravilla de día! ¡Qué lindo que sucedió y qué pena que se terminó!

Va a ser muy difícil que los Juegos Olímpicos superen el 29 de julio de 2024.

 

La presencia de DUKE en Tahití para cubrir el surfing olímpico es también posible gracias a Xavier Aguirre, Philippe Demarsan, Pepe Gelos, Chifle Pérez del Castillo, Juanja Vargas, Mateo Christodulu, Josefina y Tomás Barbé, Mónica Ugalde, Pilar Aguerrebere, Edu Fernández, Wilma Ehni, Guzmán Sarí, Andrés y Amadeo Soler, Luis Vargas y Gonzalo Madrid.

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