Foto de portada: John Bilderback 

El periodista Tim Baker escribió en 1993 que el hawaiano Johnny Boy Gomes "arruinó más sesiones de surf para más personas que cualquier otro surfista vivo". Gomes era uno de los más temidos locales hawaianos y si ibas a la meca, con una de las últimas personas con las que querías tener problemas, era con él.

Johnny Boy Gomes fue uno de los más galardonados surfistas hawaianos de la historia, especialmente surfeando en Hawái y en días pesados en Hawái. Consciente de que era un surfer poderoso, él eligió intelgentemente enfocarse en surfing en olas pesadas y no hacer el surfing mundial.

Temporada a temporada en Hawái, era una carta a tener en cuenta y ahí ganó en Sunset en 1993, el Pipe Masters en 1997 (él dice que fue el único en ganarle a Kelly en un mismo día en la ola), el Backdoor Shootout en 1999 y ese mismo año fue tercero en el Eddie.

Pero no todo fue color de rosas en la vida de Gomes, una infancia complicada en el oeste de Oahu le pasó factura. Primero, a los 12 fue enviado a un hogar juvenil por cargos por robos.

Dos años más tarde, sus padres habían muerto; la madre de cáncer y el padre por diabetes.

Increíblemente fue adoptado por el hoy en día muy conocido cantante Israel Kamakawiwo'ole.

Pero la vida siguió dura y volvió a pasar 14 meses en detención en un centro juvenil hasta que cumplió 18.

Bajo la tutela del más pesado de los sheriffs hawaianos, Dane Kaeloha, Johnny Boy se enfocó en el surfing y en poco tiempo estaba entre los primeros de la fila en Pipe, Sunset o en cualquier spot del North Shore.

Su surfing poderoso y habilidad en olas grandes le rindieron los mencionados premios pero su actitud le dio multas: En 1991 fue multado con 1000 dólares por golpear a otro competidor y en 1999 fue condenado por agresión por una pelea en Chuns Reef y tuvo que pagar 6300 dólares de fianza.

Tuvos sus patrocinadores y tuvo sus premios pero cuando terminó su vida profesional terminó la bonanza y se terminó el dinero. Junto a eso o por eso, acompañaron los malos hábitos. Johnny Boy dice que este fue su peor momento.

Tan así que hoy mismo compartió que había recuperado el trofeo de Pipe Masters que había vendido para llegar a fin de mes.

Pero la vida le dio revancha a Johnny Boy, dice que está saludable como nunca o como antes, solo que sin pelo. Bajó 45 kilos producto de despertarse a las 4am a entrenar y haciendo vida sana. Además compartió que sus finanzas están bien y todo está en orden.

En sus redes repite que tú eres el CEO de tu vida y celebra la suerte de tener una familia que lo quiere.

Gomes estuvo en lo alto y en lo bajo y su mensaje hoy en día, limpio y sano es que “no hay excusas y solo resultados” y que tu “salud es tu riqueza”, entre otros tantos mensajes positivos.