Foto de portada: WSL/Sloane

John John Florence pasa mínimo cuatro horas y media en el agua surfeando por día y máximo siete, compartió en una entrevista concedida a Stab publicada el viernes pasado.

“Quedo frito, no puedo pensar bien (después de las sesiones)”, contó.

“Tengo un problema serio, voy al agua y comienzo a surfear y luego me super motivo y me digo: ‘Dios. O está muy bueno para hacer maniobras o para tubos o aéreos’. Lo que sea que esté pasando en ese momento. Y yo pienso: ‘Está muy bueno. Va a venir una muy buena luego’. Y a las dos horas considero: ‘Debería salir del agua. Tengo que descansar’. Y a las dos horas me digo de nuevo: ‘Maldita sea, tengo quevolver a entrar’. Y esta historia se repite”, agrega.

Y luego compartió: “Mi esposa alucina. Me voy de mañana y vuelvo a las 2:30 destruido de surfear desde las 7:30. Y le pregunto: ‘¿Almorzaste? Tengo tanta hambre’. Luego como y Nathan me llama para decirme que Pipe está bueno… Soy el peor. Me sorprende que mi esposa me soporte”.

La rutina de Florence contrasta con la de Italo Ferreira, que ha compartido que transformó su método de entrenamiento a sesiones cortas, de 40 minutos a una hora y que esto ha sido clave para enfocar energía en las series de competencia.

Además complementa con mucho entrenamiento físico, lo que él dijo ha sido clave para no lesionarse.

Por el otro lado, Florence le dijo a DUKE en Tokio que él considera que puede ser que porque surfee tanto es que se lesiona tanto (leer nota aquí). Florence sufrió lesiones en sus dos rodillas en los últimos cinco años.