Bryan Pérez es uno de los pocos afortunados que está participando del campo de entrenamiento olímpico que la International Surfing Association organizó en Teahupoo.

Con ayuda de solidaridad olímpica del Comité Olímpico Internacional, las puertas se abrieron a atletas con potencial olímpico para aprender a surfear una ola que se sabe no es como Huntington Beach con medio metro.

“Para mí es un sueño hecho realidad. Siempre desde pequeño veía el evento, el CT. Y todo me impresionaba, no solo la ola sino lo lindo del lugar; la montaña… Entras en el bote y ves todas las olas escupiendo; son demasiado perfectas. ¡Qué perfección el tubo! Son todas perfectas”, le contó el local de Punta Roca a DUKE.

Y continuó: “Este es uno de los lugares más bonitos y especiales que he conocido en toda mi vida. Es increíble todo: La comida, la gente, los locales, la energía, como respetan todo; es un lugar que te llena el corazón de alegría y te transmite toda la energía buena”.

Y, haciendo justicia a la fama de la ola de ser una de las más pesadas del mundo, no todo es color de rosas: “La ola es muy pesada. Es perfecta y linda pero a la vez es fuerte, fuerte, fuerte. El reef está ahí, el drop es increíble, es una ola de mucho miedo pero a la misma vez es perfecta”.

Pérez está participando del camp junto a Alan Cleland, Cande Resano, Shino Matsuda y Saffi Vette.