Viniendo de Punta de Lobos, donde el mar se pone gigante y pesado y el agua es fría, se puede decir que buena parte del proceso de adaptación para una temporada en la meca se ha hecho.

A Alejandro Fuenzalida se lo ha visto bajando olas gigantes en Punta de Lobos y las palmeras y el calor hawaiano seguramente lo alentaron.

Sin embargo, una vez en Hawái para su primer temporada, el chileno tuvo que adaptarse a los desafíos de la meca. Surfear sin wetsuit fue sin dudas una positiva, pero los arrecifes y el importante crowd fue un desafío.

Valiente como se lo conoce, cumplió con sus objetivos en el North Shore, bajó Waimea gigante y se metió un tubazo en Pipe.

Debajo cuenta su primera temporada en la meca, en entrevista:

Has bajado olas gigantes buena parte de tu vida, estás acostumbrado a mares pesados, ¿qué diferencias encontraste en Hawái?
Primero que todo la temperatura del agua debido a la implementación que hay que usar en cada lugar, en Chile traje, botines, gorro, chaleco, etcétera. Esto hace que las sesiones sean más cortas y cansadoras debido al peso y el frío, en cambio en Hawái solo con el chaleco o el traje de baño y al agua todo el día.

También el crowd es una gran diferencia en Hawaii hay mucha gente en cada sesión, en cambio en Chile pueden haber sesiones solos con par de amigos.

Cuenta, desde tu punto de vista, ¿por qué Pipe intimida?
Primero que todo porque es una ola muy fuerte que revienta encima del arrecife, y cuando estas remando una ola se ve el reef y las cuevas, uno nunca sabe lo que pasará en un wipeout en Pipe.

Te llevaste unas buenas de todos modos, cuenta cuál fue la mejor y cómo las conseguiste en medio de ese crowd.
Si agarre un tubazo perfecto (risas). Eran mis últimos días en Hawái y quería irme a casa con una épica, era un día mediano y tipo hora de almuerzo se desocupó la cancha y me fui al agua. De repente estaba mejor puesto que nadie salió esta ola que iba perfecta y me mande, fue un tubo muy largo y profundo, sin duda de mis mejores en Hawái. La perseverancia y la paciencia fueron claves.

Y en Waimea, dropeando más deep que nadie, ese día estabas inspirado...
Sí, ese día iba con la mentalidad de llevarme una bomba a casa, estando adentro te das cuenta lo difícil que es poder conseguirlo con tanta gente y respetando los locales, pero pude agarrar unas buenas del inside, no la bomba, pero contento con todas las olas que pude agarrar siendo mi primera temporada en la meca.

Pregunta polémica: ¿Punta de Lobos es más pesado que Waimea?
Son olas muy distintas, Lobos es una punta muy larga y el drop es más fácil, Waimea es una punta más corta y el drop entre más grande más difícil, Lobos es fuerte y te arrastra mucho, Waimea es fuerte y te tira muy profundo cuando te caes. Las dos hacen mucho daño (risas).

"Lobos es una punta muy larga y el drop es más fácil, Waimea es una punta más corta y el drop entre más grande más difícil, Lobos es fuerte y te arrastra mucho, Waimea es fuerte y te tira muy profundo cuando te caes. Las dos hacen mucho daño (risas)"

Te tocó ver una actuación histórica de los peruanos y ticos, ¿cómo lo viviste desde la arena?
Fue muy emocionante ver a los latinos en el CT, desde el evento Da Hui Backdoor los peruanos mandándose de cabeza y dando tarea para la casa, después Miguel, lucca y Carlos, qué increíble performance, una lástima por Cali que se lesionó y Lucca representando hasta el último día de evento. De verdad muy motivador para todos.

¿Cómo sigue tu 2022?
Bueno mi 2022 es 100% enfocado en las olas grandes y los eventos nacionales e internacionales que me inviten, y esperando poder hacer temporada en otros lugares, viajar dentro de Chile y seguir empujando mis límites dentro de esta tremenda costa.