Cande, Valen y Manny Resano surfearon el swellazo de fin de año en Waimea

Y Manny después se fue para Mavericks. “Fue un gran año nuevo, sin brindar, pero surfeando mucho”, cuenta el argentino y nicaragüense en relato exclusivo para DUKE


De izquierda a derecha: Papá Manny, Valentina de 15 y Cande de 13, en ese momento previo a la entrada a una sesión que desafía tu vida, con el corazón latiendo fuerte pero sintiéndose más vivos que nunca. Foto: Archivo de la familia

Había mucha expectativa sobre el swell en todo Hawái porque habían puesto el Eddie Aikau en luz amarilla y se esperaba una marejada gigante. Yo estaba en California surfeando, llegué a Hawái y, bueno, siempre la gente habla de que “va a estar gigante, que va a estar gigante”.

Entonces cuando llegué las niñas estaban un poco preocupadas. Y yo les dije que tranquilas que lo que hay que hacer es ver el mar y ver las boyas y sacar propias conclusiones.

Entonces el swell empezó como a las 9 de la mañana, más o menos, y Waimea todavía no rompía, nosotros nos fuimos a ver el mar y esperar el swell ahí, las otras playas estaban más grandes y todos estaban surfeando, pero yo les dije que “vamos a esperar”.

Waimea estaba como de seis pies, no había ni olas, y las niñas decían como que: “¡Pero ni rompe!”. Y yo les dije: “Esperen, cuando veamos una nos cambiamos y vamos para el agua”.

De repente vimos una serie de ocho pies hawaianos y les dije: “Listo, al agua, acá en Hawái el mar crece rápido. Nos cambiamos y a los 15 minutos, estábamos de vuelta en la arena y vimos el primer set que estaba grande, de 12 pies.

Ir a foto 3 de este carrusel para ver a Valen bajando en el aire más deep que el resto: 

 

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Happy New Years from Waimea! Thank you Johnny lopes for letting me borrow this board, it’s sick💫🦜

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Nos metimos al toque, éramos de los primeros y la verdad que lo mejor del swell fue ahí al principio y mucha gente no se metió porque con el swell subiendo a veces es complicado porque no sabés qué tan grande se va a poner o qué tan atrás va a quebrar. Entonces, vas viendo las series crecer y no sabés cuándo va a parar.

Así que eso fue lo más intenso: Estar yo encargado de ellas, vi salir algunos sets de 18 pies hawaianos y hasta algún poco más, alguno que rozó 20.

Pero la verdad es que lo hicieron muy bien, estaban tranquilas, muy bien, se agarraron sus olas, surfeamos cuatro horas y después una sesioncita más. Y al otro día estaba más chico y surfearon dos veces más, agarraron más olas y lo lindo fue que la última sesión, del 31 yo me quedé en la playa con mi mujer y ellas se metieron solas a Waimea, habí aotors surfistas pero ya va creciendo la confianza de ellas hacia ellas mismas y de mí hacia su lado.

Fue bastante significativo que ya agarren sus tablitas y se metan a Waimea.

Eso fue el 31 y de ahí nos fuimos para casa y yo me subí a un avión y me vine a correr Mavs. Así que el 31 a la noche me encontró en un avión durmiendo, la mejor forma de pasar el año nuevo fue surfeando swelles entre Hawái y California; fue un gran año nuevo, sin brindar, pero surfeando mucho.

 

 

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If you were out at Waimea yesterday chances are between @gonzolenz and @mikeitophoto and I we got your shot! #HNY #surfing #waimea #hawaii

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