Todo lo que se sabe hasta ahora sobre la piscina de olas argentina

Comenzará a construirse este año. “Tendrá aproximadamente 1,5 hectáreas y el Surf Park será de aproximadamente 6”, informaron a DUKE desde La Ola Group


La primera piscina de olas de la Argentina comenzará a construirse en 2024, informaron hoy sus promotores de La Ola Group en otro posteo de Instagram en el que promueven su emprendimiento.

“Tendrá aproximadamente 1.5 hectáreas y el Surf Park será de aproximadamente 6 hectáreas”, dijeron a DUKE los promotores, liderados por su CEO, Sacha Wicher.

Los detalles sobre lo que será piscina de olas y Surf Park no quedan claros por motivos de confidencialidad, pero informan: “La ola que funcionará como principal atracción del Surf Park formará parte de un proyecto de mayor envergadura el cual se dividirá en distintas etapas que irán comunicándose con el avance del desarrollo”.

El lugar del desarrollo “es precisamente en el límite con el partido de Pilar”, informan y agregan que “se trata de un desarrollo turístico residencial que comenzará en los próximos meses su construcción”.

Sobre por qué se terminó ejecutando el Luján el proyecto, Wicher establece: “Este lugar se ha convertido en la zona más caliente de desarrollos inmobiliarios. Nos encontramos en el corazón de una nueva urbanización, en la zona de polo más destacada del país. Cuenta con innumerables atractivos, desde sus múltiples accesos hasta el notable aumento de barrios, colegios, clubes y diversas actividades comerciales en los últimos años.

Creemos que este es solo el comienzo, que el potencial de crecimiento es enorme y estamos convencidos de que la incorporación de la ola artificial será el impulso final para transformar esta área en la mejor de Buenos Aires y de todo el país”.

En tanto, en referencia a la tecnología, creada 100% de forma privada en Argentina, informan que funciona de la siguiente forma: “Generamos olas mediante la inyección de agua impulsada por aire comprimido. Imagínense varias cañerías que soplan agua para crear olas, que luego viajan a través de una piscina diseñada especialmente. Esta piscina tiene variaciones en profundidad, imitando a los diferentes tipos de fondos del mar, que crean las rompientes perfectas para surfear.

Nos enfocamos en crear un entorno que se integre armoniosamente en cualquier espacio. Así, la instalación no solo ofrece una experiencia de surf única, sino que también realza el atractivo del lugar donde se encuentra. Para los surfistas, proporcionamos una auténtica sensación de amplitud, con olas de distintos tipos en una misma sesión, permitiéndote visualizar la ola y disfrutarla plenamente.

Nuestra máquina utiliza un sistema neumático, que significa que tiene menos partes móviles comparada con otros sistemas. Menos piezas móviles significan menos desgaste y menos mantenimiento, lo que hace que el sistema sea más confiable, robusto y duradero.

Además, nuestra tecnología es modular. Esto significa que podés ajustar la máquina según tus necesidades. Si querés una ola más grande o más pequeña, o de distinta duración, simplemente cambias la cantidad y el tamaño de los componentes. Es como armar un set de Lego, donde podés crear diferentes configuraciones según lo que necesites.

El sistema ensamblado facilita la construcción y el mantenimiento. Utilizamos piezas estándar de la industria que se ensamblan fácilmente. Esto no solo optimiza el tiempo, sino que también reduce costos, la necesidad de traslados internacionales y evita complicaciones en el proceso de instalación”.

La tecnología será la primera en ponerse en funcionamiento, no solo en Argentina sino también en América Latina y que por ende “(generan) a partir de esto un modelo de negocio replicable en cualquier parte del mundo”.

“Ya estamos en conversaciones para la instalación de la ola en otros países, por lo que tiene potencialidades de ser exportable al mundo”, asegura el ejecutivo.

Consciente de que un emprendimiento como este no vive solo de surfistas, Wicher informa: “Los beneficiarios de la tecnología de La Ola Group pueden clasificarse en dos grupos. Por un lado, desde la perspectiva de la experiencia se encuentran los usuarios que buscan nuevos estilos de vida mucho más conscientes y saludables. Mientras que por el otro y desde la perspectiva del producto o negocio se encuentran los desarrolladores públicos o privados quienes tienen la posibilidad de generarle un valor sin precedente a los emprendimientos turísticos, inmobiliarios y/o comerciales que la atracción tenga alrededor”.

“Somos una empresa joven conformada por un equipo interdisciplinario y disruptivo al que une la pasión por el surf, la tecnología y los desafíos con la visión de crear olas en cualquier parte del mundo”, finaliza Wicher.

Las redes sociales explotaron luego de que semanas atrás se confirmó que en Luján habrá una ola artificial surfeable.

Argentina, potencia del surfing tiene en Buenos Aires miles de surfistas que guardan sus días para surfear en viajes o en el verano.

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