El comunicado enviado a los atletas que señala que no estará aplicando la nueva regla este año significa una buena noticia a medias. La WSL no se deshace de la regla con la que se adueña de los wildcards sino que se compromete por este año a no usarla.

Es dejar durmiendo el problema para el año que viene cuando seguramente se suscite una situación similar o más bien peor, especialmente porque los surfistas del CT van a estar obligados a competir en torneos challengers y porque además el tour challenger se ve mucho más atractivo para el 2022 con etapas en la Gold Coast, en Manly, Ballito, Huntington, Ericeira, Hossegor, Nueva Zelanda y Hawái.

Lo otro que resulta novedoso es que finalmente se reveló cuál es el espíritu de la nueva regla: “Existe por flexibilidad en torno a lesiones de los mejores surfistas”, reafirmando algo que la WSL hace mucho y hace mal: Cuidar a los 48 surfers que llegan allá arriba en demasía y desinteresarse por los 1.000 que están abajo hipotecando sus vidas para llegar a ese casi imposible.

En vistas de este escenario, la oportunidad para los peruanos Lucca Mesinas y Alonso Correa y para el tico Carlos Muñoz acaba de mejorar. Están a un resultado, a un campeonato de hacer historia.

El año que viene habrá un tour challenger que es esperable que tenga más integrantes del CT compitiendo y una regla que si se aplica hace mucho más difíciles las cosas.

En este momento, considerando la doble clasificación de Igarashi, Colapinto y Fioravanti, están metiéndose hasta el puesto 15 en el que está Jordy Lawler.

Mesinas que está sexto en el ranking, este cambio lo deja en un real quinto porque Igarashi está por encima de él y no usará su plaza. Esto significa que tiene que haber siete surfistas que tienen que hacer las cosas realmente bien en Haleiwa como para superarlo, es difícil pero matemáticamente posible.

Muñoz ahora está en un real noveno (Colapinto pasa a ser un doble clasificado) y la buena noticia es que suma a partir de los 10.000, su descarte es muy bajo y con solo pasar dos rondas estará mejorando considerablemente su situación.

Correa ahora está 23, depende de sí mismo, pero tiene que pensar en ubicarse entre los ocho primeros para tener alguna chance.

En el caso de las damas la abstención al uso de la regla parece no cambiar nada por ahora porque, por ejemplo, Carissa Moore, que suma a partir de 10.000, está inscripta en el evento de Haleiwa.

Todo puede suceder en ese ranking, son muchos puntos los que se reparten en una etapa y muy pocos los lugares para garantizarse. Con Hennessy y Bryan garantizadas, quedan cuatro lugares, Simmers no está garantizada y ya suma 17200, pero la siguiente en el ranking, Robinson, tiene 13300.

Sumando a partir de 10.000 puntos (6500 y 3500 en sus dos mejores etapas), Ariane Ochoa tiene que estar pensando en ubicarse entre las ocho primeras para tener chances, aunque podría darse que con octavos clasifique (en este momento la última en zona de clasificación, Fierro, tiene 12500.

Vale decir que la WSL todavía no ha informado si repetirá el formato hombre a hombre o usará el de siempre en Hawái con series de cuatro personas.

En todos los casos es un momento histórico para el surfing de estos cuatro surfers que llegan con chances reales de meterse en el CT y que, con la abstención al uso de la regla, ahora se hicieron mejores.