Foto de portada: ISA/Reed

Más de 2000 personas han firmado para que el actual presidente de la Federación Mexicana de Surfing, Gerardo Lagunes Gallina, renuncie o llame a una asamblea extraordinaria para cambiar la actual directiva de la organización.

En la web de Change.org le dicen a la autoridad: “Se te envió una carta el pasado 19 de diciembre, solicitando la asamblea extraordinaria y nuestra petición fue ignorada. El actual presidente de la FMS, Gerardo Lagunes Gallina, estuvo ausente por más de tres años sin dar ninguna señal de interés de trabajar por el surf en México. A cargo de todas las decisiones más importantes, dejó al después nombrado secretario general, Victor Coleman. Desafortunadamente, se tuvieron muchas situaciones en donde se afectó continuamente a nuestra comunidad surfer, atletas seleccionados, asociaciones estatales, patrocinadores y familiares”.

Algunos de los puntos con los que fundamentan el pedido de renuncia y/o cambio de directiva son, transcriptos de forma literal:

-Incapacidad de estructura administrativa y operativa, incapacidad de generar alianzas con otros organismos.

-Deuda con la International Surfing Association (ISA) desde 2015, que ocasionó suspensión de mundiales y afectaciones a carreras deportivas de atletas.

-Cancelación del nacional 2023 sin ningún motivo de peso.

-Deudas a atletas y a cuerpo técnico por falsas promesas de apoyo y deudas a reembolsos por gastos pagados por cuerpo técnico.

-Omisión en entrega de documentación a CONADE y COM.

-Estancamiento técnico (jueces, entrenadores, directivos y atletas).

-Desinterés en cualquier tipo de apoyo y omisión al cumplimiento de estatutos por parte del presidente.

-Falta de transparencia en toda la información, toma de decisiones y rendición de cuentas.

-Discriminación a atletas y equipo técnico al asignar apoyos económicos.

-Se busca una mejor forma de trabajo entre dirigentes, asociaciones, atletas, familias y marcas. La actual mesa directiva de la FMS está totalmente sobrepasada.

México había sido prohibido de competir en el mundial de SUP de la ISA por una deuda que arrastra con la asociación desde que organizó el mundial de esa división en 2015.

La comunidad surfera del país logró reunir 25.000 de los 60.000 que debían para lograr que los mexicanos vuelvan a competir en el torneo.